Yo enumeré mis días, mis horas, mis meses, como un enfermo en rehabilitación.
Yo los ordené, los agendé, los memorizé.
Los sumé, los resté, los marqué en los calendarios y en las paredes de la habitación.
Los hice oro, los hice logros, los hice ilusiones, los dejé rotos...
Los escribí, los recordé, los lamenté, los glorifiqué
La linea se hace expectativa que se estrella contra el suelo en un segundo
Un segundo hijo de puta que altera esa perfecta planificación esquizofrénica y puntillosa
Como cuando entraste por la ventana rompiendo el vidrio
Y sin decir ni hola, tomaste lo poco que me quedaba, para partir, y continuar tu ciclo
ajeno al mío
que ya lo habías arruinado en tu inconsecuencia.
Yo los ordené, los agendé, los memorizé.
Los sumé, los resté, los marqué en los calendarios y en las paredes de la habitación.
Los hice oro, los hice logros, los hice ilusiones, los dejé rotos...
Los escribí, los recordé, los lamenté, los glorifiqué
La linea se hace expectativa que se estrella contra el suelo en un segundo
Un segundo hijo de puta que altera esa perfecta planificación esquizofrénica y puntillosa
Como cuando entraste por la ventana rompiendo el vidrio
Y sin decir ni hola, tomaste lo poco que me quedaba, para partir, y continuar tu ciclo
ajeno al mío
que ya lo habías arruinado en tu inconsecuencia.
1 comentario:
Veiticinco dias. Veo un recorte, acaso un minimo fragmento de lo que -para mi- nunca estuvo pasando, mes a mes. El anterior fue mi cumpleaños, segun me hicieron saber. Pasan en el medio pastillas, alforjas, vertigo y displicencia. Hoy, una nueva republica ha sido creada. Limita al Norte con el asfalto y al sur con el cemento. Pero no todo esta perdido; Hacia abajo hay, quizas, tierra. Y hacia arriba mucho cielo. Se llama Saturnia y ya tiene una bandera. Es roja, a veces azul, por el efecto Doppler de esa distancia que hay entre el cerebro y el corazon [Dondequiera que esten]. Y lleva un pajarito en medio de un circulo rayado. Pense en buscar un molde, y termine aca. Despues decidi dibujarlo, como dibujare a lo largo de la noche los alados y taciturnos habitantes de esta nueva republica.
Lindo sitio el suyo.
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